En nuestro sector son comunes las presentaciones a medios, para poder explicar en profundidad un producto o nuevo servicio, más allá de lo que una simple nota de prensa puede hacer. Pero hay que tener en cuenta de que los integrantes de las cada vez más mermadas redacciones tienen que hacer un gran esfuerzo para poder asistir a eventos fuera de la oficina, así que tenemos que cuidar con mimo la presentación y hacer que el desplazamiento les haya valido la pena. Sería una pena arruinarla con un discurso aburrido y poco cuidado, que no lograra siquiera captar la atención de los presentes. Aquí dejamos 5 consejos aplicables a las presentaciones, que lograrán que el mensaje se entregue de una manera más eficaz y clara.
Cada concepto en un lugar
Los gestos de las manos y del cuerpo en general puede ayudarnos a subrayar los conceptos más importantes de nuestro mensaje. Si, por ejemplo, tenemos que explicar tres puntos referentes a un producto, hablaremos de cada uno de ellos en una zona diferente del escenario (por ejemplo, uno en el lateral izquierdo, cerca de la pantalla, el segundo en el centro, y el siguiente en la zona delantera, en el lado derecho). Así facilitaremos la comprensión de que son tres “bullet points” diferentes, y el mensaje prenderá mucho mejor.
Mira a tu público y despiértalos con preguntas
Asegúrate, mientras hablas, de dirigir tu mirada a las diferentes personas del público, tanto de los asientos más cercanos al escenario como de las últimas filas, y los laterales. Evita quedarte bloqueado hablando sólo para las personas de la primera fila.
Una buena forma de mantener la atención del público es hacer preguntas: interpélalos o hazles participar de alguna forma, por ejemplo, haciendo un mini sondeo pidiendo que levanten la mano para mostrar su respuesta (por ejemplo, en una presentación de una herramienta de booking de vuelos: “Por favor que levante la mano quien hace más de 4 viajes en avión al año” -para usar luego ese dato a tu favor)
Menos letra y más acción
Si bien el uso de un Power Point o presentación de slides puede ayudarte a explicarte mejor, no abuses de la letra. De hecho, cuanto menos texto mejor: ilustra los conceptos y datos que vayas explicando con dibujos, fotografías, vídeos… la imagen capta definitivamente más la atención que un bloque de texto, y funciona como el ancla a partir de la cual desarrollas, de palabra, las ideas que quieras expresar.
Un poquito de salsa
Ameniza la presentación con ejemplos, y no obvies la importancia de una buena historia. Contar la anécdota a partir de la cuál surgió una idea, o el hecho biográfico personal que hizo a un emprendedor estar en el lugar correcto en el momento adecuado, darán color a tu presentación, y logrará captar la atención del auditorio.
Ensaya tu acting
Ante una presentación, seguro que nunca olvidamos ensayar repetidamente las slides, intentando recordar cuál va delante y cuál después, y qué diremos en cada una de ellas. Pero muchas veces relegamos a un segundo lugar cómo lo diremos, y nos lanzamos al escenario sin haber probado el timbre, la intensidad o la velocidad con que explicaremos cada parte, o los gestos con los que acompañaremos nuestras declaraciones. Un tono de voz monótono y aburrido dará al traste con tu presentación, aunque la idea que cuentes sea emocionante. Estudia cómo modularás tu voz dependiendo de lo que vayas diciendo, y planea tu lenguaje corporal para que este te ayude a subrayar los conceptos clave y a poner énfasis en las partes más importantes de tu exposición.
Foto: TEDx LazarskiUniversity