No es nada fácil erigirse en voz de una compañía, una institución o una marca, y hacerlo, además, con autenticidad e impacto. De hecho puede llegar a convertirse en una tarea muy difícil, particularmente en situaciones de crisis.
Pero, como todo en la vida, la portavocía se aprende y se entrena. Por eso Ana Calleja (socia fundadora de Ziran) y Ana Bermejillo (ejecutiva de cuentas Senior) hemos escrito este volumen, donde reunimos técnicas, trucos y consejos, así como todo lo que es mejor no hacer, esas trampas en que sería ideal que no cayésemos nunca. El portavoz corporativo. Manual de Supervivencia’ está editado por Baltha y se compra, en ebook o impreso, en Amazon (de nuevo el link, no os vayáis sin comprarlo). Ha escrito el prólogo el Vicerrector de Alumnos de la Universidad CEU San Pablo (que es uno de nuestros clientes en Ziran), Ángel Bartolomé.
Empezamos con un capítulo fundamental, explicando para qué y por qué, todavía, entre las redes y los millones de voces digitales, las RR.PP. siguen haciendo mucha falta. Es decir, para qué vale la comunicación corporativa, objetivos que deberemos conocer si queremos desempeñar bien la función de portavoces.
Seguimos con las reglas de oro de la comunicación ¿Que el fundador de Tinder no sabe que es la sodomía? ¿Que uno se vuelve homosexual por comer pollo en Bolivia? ¿Que para vacunarse del coronavirus lo mejor es inyectarse lejía? Hay patinazos en la comunicación que perdurarán en los anales de las RR.PP. y marcan para siempre la reputación de instituciones y compañías.
Por eso proponemos estrategias para comunicar con sentido y oportunidad y que los mensajes que queremos compartir no se distorsionen, sino que lleguen a sus públicos y generen el efecto deseado en nuestra audiencia.
Nos adentramos en el terreno pantanoso de las redes sociales, donde una metedura de pata puede transformarse en una condena a perpetuidad, y del «Me too» y el caso Epstein, pasamos a grandes escándalos como la gestión comunicativa del brote de listeria en España o actitudes mejorables al comunicar durante la pandemia de coronavirus.
Todo el libro está aderezado con ejemplos y más ejemplos que nos hacen pensar no solo que «solo quien esté libre de pecado puede tirar la primera piedra», sino, sobre todo, hasta qué punto es importante planificar, practicar y seguir practicando, para convertirnos en los mejores portavoces corporativos del mundo.
Un buen punto de partida es este accesible y, esperamos que ameno, Manual de Supervivencia, un centenar de páginas tras cuya lectura seremos sin duda más eficaces y más conscientes del impacto de nuestras intervenciones públicas.
